viernes, 29 de mayo de 2009

LA REVOLUCIÓN (7)

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El día amaneció plomizo y tristón, como venía sucediendo últimamente, era como si las nubes negras se hubiesen instalado allí de forma permanente nublándolo todo. Luno caminaba cabizbajo, mirando hacia un lado y otro, como venía haciendo desde que había tenido el forzoso encuentro con el misterioso enmascarado, temiendo que lo matasen en cualquier momento acusándolo de alta traición, sin embargo no sucedió nada de esto. Los días fueron transcurriendo tan trabajosos, desesperados y monótonos como siempre. Sin embargo Luno, no se fiaba, vivía con el miedo metido en el cuerpo, por eso cuando aquel mismo día por la noche, los hombres encapuchados volvieron a apresarle, creyó que no volvería a ver la luz del sol.
Lo introdujeron de nuevo en el carruaje, que arrancó tan veloz como siempre, sin embargo esta vez, no se encontró con el enmascarado dentro del vehículo, sino que lo llevaron a una especie de pabellón que se hallaba muy alejado y oculto en el bosque. Allí le condujeron hacia una gran sala que apenas tenía muebles, tan sólo un atril y alguna silla. Le empujaron hasta la silla, en la que había un personaje sentado, se trataba del enmascarado. Le colocaron frente a él y se apartaron un poco, Luno temblaba tanto como un bloque de gelatina, y por un momento creyó que se orinaría en los pantalones.
- Muy bien, Luno, nos vemos de nuevo – dijo el enmascarado a modo de saludo -, ¿has pensado en lo que te propuse aquella noche? – preguntó acto seguido yendo directo al grano.
- Sí… - musitó el joven.
- ¿Y bien? ¿Aún quieres cambiar las cosas? – preguntó el enmascarado.
- Yo no tengo nada en contra del líder – se apresuró a responder el chico.
- Me decepcionas, Luno, te consideraba más valiente, más coherente, ¿no acusabas tú a los demás de mirar hacia otro lado como ratas cobardes? Vamos… - le instó el enmascarado.
- ¿Qué quiere? – preguntó el chico más por ganar tiempo que por otra cosa.
- Veamos, yo sé que te opones a El Líder, podría denunciarte en cualquier momento, incluso podría ser un enviado de El Líder, eso es lo que estás pensando, ¿no es cierto? – Luno guardó silencio sin saber muy bien qué responder – Bueno, pues te diré algo, si eso es cierto, ya estás perdido, de hecho ya te habría matado, ¿o acaso crees que El Líder tarda tanto tiempo en deshacerse de sus traidores? Vamos, Luno, dejemos de perder el tiempo, hay mucho trabajo por hacer.
- Yo no soy más que un pobre diablo, no puedo hacer nada – se limitó a decir el chico encogiéndose de hombros.
- Pues no era eso lo que decías a los demás…
- Yo no…
- Escucha, Luno, en algo tienes razón, no eres más que un ser ínfimo, tú sólo no puedes llevar a cabo nada, y precisamente es ahí donde entro yo – hizo una pausa intencionada para que el chico tuviera tiempo de digerir las cosas -. Colócate tras el atril, ahora comienza tu primera clase práctica.
- No comprendo…
- Aprenderás a lanzar discursos.
- ¿Discursos?
- Sí, discursos, arengas, el arte de la retórica.
- No creo que así se pueda derrocar a El Líder – Luno mostró cierta sorna en su apreciación.
- Te equivocas, muchacho, ¿acaso no te das cuenta de dónde le proviene la mayor fuerza a El Líder? – le puntualizó el enmascarado cargado de paciencia, parecía estar acostumbrado a llevar a cabo labores como aquella.
- Del ejército, tiene un gran ejército – respondió Luno sintiéndose seguro de lo que decía.
- Indudablemente el ejército es importante, sí, pero no olvides que éste está formado por hombres, hombres del pueblo que sirven a El Líder igual que los demás, quizás con algunos privilegios, pero sirvientes a fin de cuentas, y también a ellos les tiene que convencer, que hacer ver que lo que Él promulga es lo mejor, porque de no hacerlo podrían levantarse en su contra, y ellos tienen las armas…
- Pero El Líder es un ser prácticamente divino – le interrumpió de pronto Luno con ingenuidad.
- Te creía más inteligente, muchacho… - hizo una pausa y continuó enseguida – El Líder es un hombre, y su poder radica básicamente en los discursos y arengas que lanza, entre otras cosas. Palabras perfectamente seleccionadas y estudiadas que convencen a las gentes de lo que Él quiera que sean convencidos. El Líder es aconsejado sobre cuánto tiempo tiene que estar expuesto ante el público, para que no se quede corto, o por el contrario, se exceda, todo, absolutamente todo está perfectamente calculado, ¿por qué crees que se mantiene siempre arriba? ¿Por qué crees que los soldados serían capaces de morir por Él? Porque les ha seducido con su verborrea, Luno, por eso mismo…
- Entonces no hay nada que hacer contra él – se apresuró a decir el chico abatido –, es indestructible.
- Ahí es donde te equivocas, chico, ahí es donde metes la pata – explicó el enmascarado -. El Líder ha sido creado, y por lo tanto, también puede ser destruido, solamente hay que cambiarlo por otro.
- Pero la gente lo quiere a él… - musitó Luno dubitativo, ya no estaba seguro de nada, la determinación de aquel hombre le estaba dejando fuera de juego.
- La gente, la gente – Luno sintió que sonreía tras la máscara de forma condescendiente, y se vio muy ridículo -, a la gente solamente hay que despertarla de su letargo, mostrarle otras alternativas mejores, que haga que sus vidas no sean tan miserables, darle alguien a quien seguir para echar abajo a El Líder.
- Es muy difícil encontrar a alguien que pueda hacer eso…
- ¿Tú crees, Luno? Porque desde mi punto de vista, ya lo he hecho, he encontrado al candidato perfecto – dijo el enmascarado -. Tú, Luno, tú eres el que lo hará…
- ¿Yo…? – preguntó el chico retrocediendo un paso asustado.
- Sí, tú, eres el único que ha tenido agallas de tratar de levantar a las gentes – respondió el enmascarado.
- Pero yo no puedo hacerlo, no puedo competir con esos discursos espléndidos, y no tengo un ejército de hombres dispuestos a dar la vida por mi causa – rebatió el chico.
- Yo te ayudaré a conseguir todas esas cosas, yo te prepararé, yo te haré el nuevo líder y podrás ayudar a tu gente – soltó el enmascarado triunfal, levantando las
manos hacia el techo.
( Este relato pertenece al libro "Arcas cerradas", que se puede adquirir a través de este blog, en la etiqueta libros para comprar o en los siguientes enlaces:TAPA DURA:http://www.lulu.com/content/6224792TAPA BLANDA:http://www.bubok.com/libros/7792/ARCAS-CERRADAShttp://www.lulu.com/content/6212380)CONTINUARÁ...

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